dimanche 24 janvier 2010

Hubert Reeves y el planeta azul



"La Tierra, planeta azul, en el que astrónomos entusiastas captan la luz de estrellas en los confines del espacio.

La Tierra, planeta azul, en el que un cosmonauta, desde la ventana de su nave, enumera los continentes de las geografías de su niñez.

La Tierra, planeta azul, en el que un dictador celebra la Navidad en familia, mientras que millares de cuerpos arden en los hornos crematorios.

La Tierra, planeta azul, en el que, descolgándose con estruendo del casquete polar, un iceberg azulado comienza su largo periplo oceánico.

La Tierra, planeta azul, en el que dieciséis familias han acumulado más riquezas que cuarentayocho paises pobres.

...."

Hubert Reeves: "La Tierra, planeta azul", introducción a su libro "Chroniques du ciel et de la vie". La traducción es mía, así como la selección de los versículos (hay más). Echadme la culpa si no os gusta.

Bueno, queridos lectores, no sé si conocéis a Hubert Reeves. Reeves es un divulgador científico, pero al mismo tiempo es un ecologista convencido. Podéis estar de acuerdo o no con lo que dice, pero al menos es interesante conocerlo porque los temas que trata están a la orden del día, sobre todo después del fiasco de Copenhague. Desde luego, para leerlo no es necesario comulgar con todos sus postulados (por ejemplo, a mí lo del vegetarianismo no me acaba de calar. Oyesss, un buen jamoncito de Jabugo es algo que te eleva a una categoría anímica superior). Pero, insisto, vale la pena leerlo. Además, es ameno, conciso y fácil de leer. Yo acabo de terminar "Chroniques du ciel et de la vie", Editions du Seuil. Antes había leído "Crónicas de los átomos y de las galaxias", en español, en el libro de bolsillo de Alianza Editorial.

Si no os gusta podéis criticarme, cosa que presta un montón, como dicen en Asturias.

El diaporama que os pongo a continuación está un poco traido por los pelánganos, pero en fin, ahí va. Las fotos son sorokinescas. No os digo de quién es la música, así podéis adivinarlo. Eso sí el autor no pertenece a la SGAE, tranquilo, Ramoncín.





vendredi 15 janvier 2010

A garota de Ipanema



Anoche, queridos amigos, se me apareció en sueños el arcángel San Miguel. Bueno, en realidad, no sé si era el arcángel San Miguel o el espíritu de Doña Emilia Pardo Bazán. Es que yo, en sueños, soy un poco corto de vista. Además, no sueño en colores, joroba. Me han dicho que eso es muy malo y que denota no sé qué maldad de espíritu, o del intestino grueso, o algo así. Pero que no, que no sueño en colores. En fin, fuere quien fuere mi aparición me dijo con voz tronante: "SOOOROOOOKIN, tienes a tu público abandonado, no les cuentas nada desde hace la tira de tieeeempo". Me disculpé como pude: "perdón, Doña Emilia, o Don Miguel, o quien sea,.... es que soy un despistado, me distraigo... ayer sin ir más lejos puse la cafetera y se me olvidó cambiar el café del día anterior, o sea que bebí recuelo, eso sí, con leche". Pero bueno el caso es que la aparición tenía razón, así que voy a tratar de remediarlo, amigotes.

Os voy a contar lo de la Garota de Ipanema. Ya sé, es una canción, claro, pero además es un bar de lo más chulo en Ipanema. Ipanema es lo más "chic" de Rio. Está al lado de Copacabana, pero se nota enseguida la diferencia: en Ipanema hay más pasta (lana, cuartos, dinero) y mejores sitios para tomar una copa y cenar, etc.. "A Garota de Ipanema" es un sitio donde se supone que calmaban su sed Tom Jobim y Vinicius de Moraes, o por lo menos, se llama así en honor a su famosa canción.




Comer, lo que se dice comer, pues no es que se coma especialmente bien, pero tiene ambientillo. Y bueno, mi colega Frank tuvo que dar la nota otra vez. Pidió una pizza. El camarero le dijo "pequena", pero Frank, indignado respondió "No, a big one". Total, que con toda su humanidad no se la pudo acabar:



La sorna del camarero y la sonrisa de conejo de Frank cuando devolvió media pizza no se pueden describir. Pero, ea, eso son cosas que pasan. Nosotros creímos -o alguien nos dijo- que había música en directo. El día que fuimos, la música (y los bailes) estaban en la calle, no en el bar. Como teníamos una mesa al lado de la calle nos vimos unas capoeiras de lo más fino. Podéis ver en el vídeo que los artistas tiene que disputarse el sitio con coches, autobuses y gente que pasa. Pero nadie se altera.


lundi 4 janvier 2010

Luto en Rio



Favela Morro de Cantagalo, Rio de Janeiro



Queridos amigos, me he enterado que ha habido casi un centenar de muertos en el estado de Rio de Janeiro a causa de las lluvias. Unos en Angra dos Reis, sepultados por un corrimiento de tierras; otros en las favelas de Rio. En esas circunstancias, abandono el espíritu jocoso y "nonchalant" de este blog para manifestar mis condolencias a las familias de las víctimas. Es fácil culpar a la naturaleza de estos desastres, pero quien haya visto las favelas de Rio (desde lejos, que no me voy a tirar pegotes. La foto de la favela de Cantagalo está tomada desde el hotel, en Copacabana), se da cuenta que están expuestas a cualquier percance, tan frágiles, construidas con materiales de chichinabo en las faldas de la montaña.

He borrado consecuentemente mi post anterior, ya que me ha parecido una frivolidad en esta situación.

lundi 21 décembre 2009

El nevadón del siglo en Bruselas




Place de Broukère








El Parking de Roodebeek







la terraza de Sorokin

Queridos amigotes y otras gentes de diversas extracciones y procedencias que tenéis el extraordinario buen gusto de leer mis crónicas. Interrumpo por un momento el apasionante relato de los sucesos que me acontecieron en Brasil la semana pasada (prometo retomar el hilo en la próxima entrada, no os creáis que os voy a dejar así, a dos velas) para poneros unas fotos de la gran nevada que ha casi-casi colapsado Bruselas, cancelado no sé cuantos vuelos y metido a los Eurostar en el garaje. Como dirían los British: ¡El Eurostar no funciona: el continente está aislado!

Y como ya imagino algunos maliciosos diciendo eso de que "¿no decían que el calentamiento global amenazaba el planeta, etc?", os recuerdo que uno de los efectos del calentamiento global, puede ser que Europa se congele. Si el Artico se calienta, la corriente del Golfo -que es la que nos tiene calentitos- se puede parar, y, hale, a pasar frio.

En fin, en la próxima entrada volveré al calor de Brasil. Entre tanto, FELICES FIESTAS a todos

mercredi 16 décembre 2009

Garotas, taxistas y otra gente de Rio



Queridos amigos que me leéis (vaya paciencia la vuestra) desde los seis continentes del planeta (Ya, ya sé que antes eran cinco, ya os explicaré otro día por qué ahora son seis). Acabo de volver de Rio de Janeiro y debo decir que me ha gustado un chingo, como dirían mis cuates mexicanos. Y eso, a pesar de que me ha llovido durante casi toda la semana. Me ha encantado cómo se toman la vida los cariocas, la belleza de Rio, y otros lugares comunes (no por comunes menos ciertos) como lo macizas que están las garotas, etc. Véanse, por ejemplo, las tres garotas que os he puesto en el encabezamiento, que se han quedado casi petrificadas mirando la fascinante playa de Copacabana (la foto me costó diez reales, porque el artista me sorprendió cámara en mano y preferí no discutir)

En cuanto al carácter de los cariocas, os contaré lo que nos pasó una mañana al salir del hotel. Llovía y queríamos coger un taxi. En la puerta del hotel generalmente había taxis sin ningún signo exterior que los identifique, pero ese día no había ninguno, así que nos paramos en la puerta esperando que apareciera uno. Llegó uno, se paró delante y, en menos de lo que cuesta contarlo, nos zambullimos dentro. Mis coleguis, un francés y un belga habían decidido desde el principio que quien hablaba era Sorokin, así que le dije en mi penoso portuñol al conductor dónde queríamos ir. Pero, ¡maldición! el tipo me contestó y yo no comprendí ni taba. Como me lo decía sonriendo, pensé que era algún comentario simpático, pero nada, que el hombre no arrancaba. Por fin, vino el portero del hotel e iluminó nuestros tarugos cerebros: era un coche privado, no un taxi. Ya me diréis, si a vosotros se os suben tres extranjeros de repente en el coche, ibáis a reaccionar tan relajados. Y eso que mi colega Frank puede pesar dos o trescientos kilos:



Aquí aparece entregado a su deporte favorito. Le he borrado la cara, no vaya a ser que lo vea su santa esposa y descubra que no ha respetado la dieta durante el viaje. El restaurante de la foto se llama "Carretâo", está en Copacabana y según te sientas empiezan a desfilar camareros con espetones llenos de diversas carnes, hasta que sales rodando de la mesa. Ya os contaré más otro día.

mercredi 2 décembre 2009

La ferme de Rochehaut




La ferme de Rochehaut, para qué os voy a decir otra cosa, está en Rochehaut. Ya sé, ya sé que me vais a decir que para ese viaje no hacen falta alforjas, os oigo murmurando que si su nombre reza "de Rochehaut" es porque estará en tal lugar. Pues no, caramba. ¿"La Almunia de Doña Godina", por ejemplo, está en "Doña Godina"?, ¡No!, que está en Zaragoza... luego la partícula "de", no siempre es un indicio locativo. Cierto, que es fácil deducir por el contexto si "de" es locativo o es genitivo... pero, ahí va una más bien complicada: "Puebla de Zaragoza" ¿Está en Zaragoza? ¿Eh?. Pues os habéis colado, porque es la capital del estado de Puebla, en México. Lo de "Zaragoza" hace referencia el general Ignacio Zaragoza, que le dió una buena soba al ejército francés un cinco de Mayo hace... no sé, un chingo de años.

Bueno, que se me va el santo al cielo, que me voy por los cerros de Úbeda (¿hay cerros en Úbeda?). Decía que "la Ferme de Rochehaut" está en Rochehaut. Un pueblito de las Ardenas, muy cerca de la frontera francesa. Cuatro casas, la iglesia, y la "Ferme", que tiene hotel, restaurante de siete u ocho mil estrellas y tenedores, Brasserie, granja con animalicos diversos, y otros entretenimientos. Aquí os pongo el plano, en el que no se ve nada, pero, oye, queda muy cuco ponerlo:



Os recomiendo ir a pasar un fin de semana y disfrutar del menú gastronómico. Nosotros, fuimos una pandilla de siete personas, llegamos a eso de las siete y media de la noche (era invierno) y estuvimos cenando hasta más allá de la una de la madrugada. Estos festines en Bélgica funcionan así. Ahí van unas fotos de algunos de los sabrosos platillos:



Entrada: Filetitos de "Saint Pierre" (gallo, entre nosotros)



Plato: Pintada con verduras caramelizadas

Por supuesto, en medio, antes, después, "mises en bouche", sorbetes entre platos (los famosos "trous normands"), tabla de quesos, postres, y la repera.

La bodega, para qué os lo voy a contar. Vamos, no os lo voy a contar porque no me acuerdo. Me acuerdo de una botella de Morgon, que vino tras varias botellas de Côtes du Rhône y luego... la negrura total. Ya sé, ya sé, que no es nada ejemplar lo que estoy contando. Eso sí, me acuerdo del desayuno del día siguiente y una vuelta por la granja a visitar los animalicos. Y que alguien condujo de vuelta a Bruselas.

O sea, que si os animáis a ir, que vale la pena, o lleváis un "bob", como se llama por aquí a los que no beben, o pasáis la noche "sur place". La hostería es confortable. No voy a decir que es barata, pero está muy bien.

lundi 23 novembre 2009

El pais de las mil birras








Birras, cervezotas, chelas, bières, ПИВИ, como queráis. Tal vez no sean mil, pero hay un mogollón de diferentes tipos de cervezas en Bélgica. El dicho es que hay una diferente para cada día del año, como dicen los franceses con sus quesos. Las hay de todas clases, colores, sabores, grado alcohólico... algunas se han hecho famosas en todo el mundo mundial; otras son artesanales, pero todas tienen un toque especial.

Bueno, exagero, porque las rubias de siempre que por aquí llaman "pils", como la Maes y la Jupiler a mí no me dicen gran cosa. Además, cuando los belgas pronuncian "pils", suena como "pis". A mí, al principio me causaba una impresión extraña cuando alguien me decía que si quería beber una "pis". Pero bueno, como casi nunca tomo "pils", ya no me afecta.

En el otro extremo del arco cervezario está la Bush (sí, sí, se llama así) de Tournai, que tiene doce grados alcohólicos. Te puede dar más disgustos si no tienes cuidado, que los que su homónimo ha dado al mundo.

Pero en fin, el corazón de todo el grupo de cervezotas belgas son las cervezas trapistas, las de abadía y las artesanales. Un servidor, como mucha gente, confundía al principio las trapistas y las de abadía, pero aunque su origen viene a ser el mismo, ahora no lo son. Deben su existencia a la gran labor que hicieron los monasterios en la alta Edad Media. Mientras los señores feudales se dedicaban a hacer la guerra y ejercer el derecho de pernada, los monjes hacían cerveza. Nunca les estaremos suficientemente agradecidos.

Pues decía que las trapistas son cervezas que todavía están hechas por monjes. Según mi libro (a ver si os creéis que hablo de memoria, ¡sapristi!) sólo hay cinco en Bélgica y una en Holanda. Las más conocidas son la Chimay y la Orval. La holandesa la hacen en un monasterio cerca de Tilburg y es de la única que tengo una foto a mano:



Las cervezas de abadía son las más famosas por ahí, por el mundo exterior. Estas cervezas, aunque se hacen en abadías, ya no las hacen los monjes, sino sociedades diversas, como el grupo Interbrew que fabrica la famosa Leffe. Otras son la Maredsous, la Grimbergen, etc. Por cierto, es importante beber la cerveza en una copa adecuada. Una vez en un bar de esos modernetes que han abierto en Londres últimamente, vi que tenian un grifo de Leffe. Le pedí una al camarero y me respondió directamente en francés excusándose porque tenían que servirla en un vaso de cerveza inglesa. Cabezota, insistí que bueno, que vale, que quería la Leffe. Nunca debí hacerlo. La Leffe no sabe a Leffe en un vaso inglés. De verdad.



Las artesanales se hacen en braserías más o menos grandes y hay montones. Esta es mi preferida. La hacen en Rochehaut, cerca de la frontera francesa, en una granja-restaurante-hotel que os recomiendo, amigotes.




Bueno, y ya me estoy poniendo plasta, así que voy a cortar aquí. Faltaría mencionar las cervezas de trigo (blancas), las kriek (de frutas), las gueuzes, faros y demás. Para estas últimas, os refiero a un post de Pablo el Flamenco, que de esto debe saber:

Y nada más, sino buenas noches y hasta la próxima. ¡Ah, no! Perdón, no he mencionado el libro de donde he sacado toda esa cantidad de erudición cervecera:

"Le Goût de la Bière Belge" por Christian Deglas, de Editions J.-M. Collet.

samedi 14 novembre 2009

La Movida Madrileña






"Dicen que ¡Madrí, Madrí!,
Y yo digo ¡Arnuero, Arnuero!
que en Madrí cagué en los pantalones,
y en Arnuero, donde quiero"

(Jota tradicional montañesa)


Vaya por delante, queridos amigos, mi declaración de profundo amor por Madrid, Madrí, Madrit. Amor, absolutamente independiente de las circunstancias políticas, de quien esté al mando de la Villa, de quien abra agujeros por todos los rincones o de quien decida que los pulmones de los madrileños y visitantes deben estar encantados de soportar el humazo del tabaco en todos los lugares públicos, etc.

Lo que pasa, es que cuando una va por la Villa y Corte de naranjas a ciruelas (lo de higos a brevas ya está muy sobao), uno puede comparar con un antes y un después; o darse cuenta de que lo que antes le parecía normal, tras venir de tierras lejanas, le puede parecer algo chocante. Pero, todo va "zin acritú".

Lo del humo, pues está muy bien, ¡qué diablos!. Oye, la gente se va a broncear a la playa sabiendo que corre riesgos por la exposición al sol... Pues esto es lo mismo, se trata de broncearse los pulmones, que cuando están blancorros están feísimos. ¿Qué hay un riesgo? bueno, y qué. Además, los que no fumamos, así podemos comparar los diferentes aromas (o pestazos) de los cigarros de la gente que nos rodea en la barra del Bar, Pub, Restaurante, Chigre, Cafetería, etc que sea. Con eso ampliamos nuestra cultura, a la par que ennegrecemos un poco nuestros descoloridos pulmones.

Hablando de las obras que están despanzurrando medio Madrid, viene a cuento lo que dijo una moza que venía del pueblo hace años cuando le preguntaron si le gustaba Madrid: "pos no sé, cuando la acaben, a lo mejor está bonica".

Ya sé, ya sé, listillos, que Keynes decía que hay que hacer obras públicas en tiempos de crisis, pero, vaya, se supone que deben ser obras públicas útiles. No sé si cambiar la estatua de Colón de sitio es útil o no, pero en fin, nuestros ediles sabrán, que son muy espabilados.

En fin, bueno, que si os interesa profundizar más en los temas madrileños, en plan serio y fuera de estas pequeñas chanzas, os recomiendo un opúsculo del Observatorio Metropolitano: "Manifiesto por Madrid", publicado por la librería Traficantes de Sueños,en la Calle Embajadores, 35, Madrid.

Y ya, os dejo con una pequeña impresión de la movida tal cual es hoy en día:




mercredi 28 octobre 2009

Vladimir Fedorovski



Queridos todos (fórmula de saludo que siempre me ha dejado un poco perplejo, porque ¿quienes son -somos- todos? ¿todo el mundo? ¿incluyendo a Carlos Ruiz Zafón y a Tom Cruise, por ejemplo?), pero en fin, la voy a utilizar por una vez ya que todas las demás las tengo un poco gastadas.

Pues decía, que "queridos todos": como últimamente todos mis posts se terminaban con alguna mención a alimentos, bebidas o similares, he decidido hablar de otra cosa: de libros. Porque, no os creáis, aparte de comer y beber tambien leo (en general, no al mismo tiempo, porque te puedes liar y llevarte un trozo de pescado a la nariz en vez de a la boca, etc.)

Bien, sigo. Curioseando por una librería, me topé de manos a boca con unos libros que me llamaron la atención. Aunque eran de la colección "le Livre de poche" tenían unas bonitas portadas con fotos de temas rusos, y a mi eso, me motiva, así es que, tras hojearlos un poco, me compré dos: los que os he fotocopiado en el encabezamiento. Bueno, queridos todos, pues no he podido despegarme de mis libros desde que empecé el primero, el de San Petersburgo. Hoy acabo de terminar el segundo, el del Kremlin, y mañana me voy a precipitar a la primera librería que encuentre a comprar mas de Fedorovski (cosa que no será difícil, porque leo en la Wiki que ha escrito un montón)

Fedorovski es un testigo directo de la "perestroika": trabajó para Gorbatchov, habiendo sido antes traductor y diplomático. Escribe directamente en francés, o sea que no temáis a los desmanes habituales de los traductores. Vive en París y le han dado algún premio que no recuerdo. Su francés es impecable y sus libros se leen sin sentir (no tengo ni idea de si hay traducciones al castellano). Si bien no despliega una gran profundidad de análisis, ni se mete en elucubraciones sociológicas, sus libros están bien documentados y no da puntada sin hilo.

El de San Petersburgo roza mas la crónica mundana y literaria. Sus personajes, aparte de los zares y sus adláteres, son todos los escritores rusos del XIX. Historias, algunas trágicas, otras divertidas; de Pushkin (murió en un duelo), Dostoievski (se salvó en el último minuto de que lo ejecutaran por conspirador), Mayakovski (se enamoró de una nena de dieciséis años), etc... ¿Sabiais, queridos todos, que Potemkin, aparte de ser un acorazado donde la carne tenía gusanos según Einsenstein, fué el verdadero jefe de Rusia durante el reinado de Catalina la grande y, claro, su amante?, ¿que Alejandro I, el zar que derrotó a Napoleón, había sido testigo mudo -sin protestar- del asesinato de su padre, Pablo I? Y así, un montón de historias.

El del Kremlin es mas político, y llega hasta nuestros días. Fedorovski dice que la tradición rusa de asesinar a diestro y siniestro cuando se está en el poder, fue culpa de los tártaros de la Horda de Oro, que ocuparon Rusia en el S XIII, quienes enseñaron cómo liquidar a todos los que se les oponían. En fin, quién sabe.

Hablando de Stalin dedica varios capítulos al espionaje soviético. Fascinante la historia de los cinco de Cambridge ¿Sabiáis que Stalin era un paranoico que no se creyó todos los informes que le pasaron diciendo que Hitler iba a invadir la URSS? Stalin pensó que era una intoxicación de los británicos.

En fin, que me han interesado un monnnntón. Y para no terminar sin hablar de lo que a todos nos interesa, Fedorovski cuenta que Stalin era un tío frugal, que casi ni comía, pero que, eso sí, bebía un tinto de Georgia que era la monda. No sé si será el mismo, pero en la Duty free de Sheremetievo exhiben unas botellas a 200 euros que pretenden que es el vino de Stalin. Huelga decir que nunca lo he probado.





mercredi 21 octobre 2009

Donde comer Fondue Bourgignone en el centro de Bruselas



Una fondue es algo muy, digamos, "comunitario". Se junta un grupo de amigotes, se sientan alrededor de una mesa (si es redonda mejor), te traen unos cuencos de aceite hirviendo, unos pedazos de carne, unas salsitas y unos pinchos de colores, y hale, a meter cada uno su pincho en el cuenco, mientras van cayendo botella tras botella de vino tinto y el volumen de las conversaciones y carcajadas va aumentando en función del tiempo. En términos matemáticos, L(litros de vino) + V (volumen de las carcajadas)=f(t) (función monótona creciente).

El único engorro suele ser que toda la ropa que llevas puesta para la ocasión tiene que ir derechita a la lavadora al llegar a casa, porque el pestazo que levantas a humazo, aceitorro, etc.. hace que te sigan los perros por la calle pensando que eres una salchicha semoviente. En fin, toda no, no hagáis como yo que una vez metí una parka de tela encerada que me había costado 250 pounds en Londres ("Barbour", que uno no se pone cualquier cosa) en la lavadora, y lo que salió de allí fue un trapo flácido, por supuesto sin huella de la cera que antes lo cubría. Gajes del oficio.

Bueno, pues a lo que iba, que he decubierto un sitio perfecto para empujarse una fondue en plan grupo de amiguetes en pleno centro de Bruselas, a unos doscientos metros del Rond Point Schuman. "Met Jeannine" se llama, está en la Avenue d'Auderghem y funciona hasta tarde por las noches. De hecho, nosotros nos fuimos a la una de la mañana, lo que si para Madrid sería una nadería, para Bruselas es bastante tarde. Tiene una mesa redonda en un altillo ("mezzanine") donde se pueden acomodar diez personas sin problemas, pero conviene reservarla con tiempo. La única pega es que tiene un aire acondicionado que sopla directamente sobre la mesa en cuestión, pero el camarero, muy amable como todo el personal de la casa, lo apagó y encendió a petición nuestra como cinco o seis veces. Cuando llegas a la mesa, tienes frío: apagas el aire; cuando lleva el aceite hirviendo media hora, tienes calor: enciendes el aire. A la media hora, vuelves a tener frío, vuelves a apagar el aire, y así todo el rato. Tiene su gracia, no os creais.

Mientras papeas, ponen en el estéreo una música bastante chula. En un momento de bajada del nivel de la conversación, me di cuenta que estaba sonando una pieza buenísima. Me precipité escalera abajo y le pregunté a la patrona que qué era eso. Así me enteré de la existencia de "Chocolate" Armenteros, del que para mi bochorno y vergüenza, no tenía noticia. Mucho Buena Vista Social Club, mucho Cachao, mucho Bebo Valdés y Tito Puente, pero del Chocolate, ni idea. Es buenísimo, y si no os lo creeis, ahí va este vídeo que me he agenciado mientras tanto:



En resumen, que fue una velada muy agradable.

lundi 5 octobre 2009

"Philadelphia Story" de George Cukor


Es un hecho demostrado hasta el aburrimiento que existe una conspiración universal entre todas las cadenas de televisión para impedirnos dormir. Tooodas se empeñan en poner las mejores películas a unas horas inversosímiles. Ayer, por ejemplo, en TCM Bélgica pusieron "Philadelphia Story" de George Cukor a partir de la una de la madrugada. Yo, pánfilo e inocente pichón, la vi empezar y me dije: bueno, la dejo grabando y me voy a dormir. Je, je, pobre infeliz: desde el primer minuto, me quedé como pegado al sofá, con los ojos y las orejillas fijos en la pantalla. Y sin parpadear ni moverme salvo para soltar alguna estridente carcajada de vez en cuando. Me reí, disfruté, se me olvidó la hora, me enamoré de Katherine Hepburn (que ya tiene bemoles la cosa), me partí de risa con James Stewart... Encima, cuando se acabó, a las dos y media y me fui al catre, no podía pegar ojo reviviendo los momentos más geniales del film (casi todos).

En todos los manuales y libros de cine, consta que Cukor es un magnífico director de actrices, pero aquí, con Katherine Hepburn el resultado es sensacional. Pero no sólo eso, todo el reparto está genial. A Jimmy Stewart le dieron un óscar por su actuación. He estado dando vueltas por la web y he leído que hay gente que pensó en su día que no se lo merecía. Echad un ojo a esta escena en la que llega borracho a casa de Cary Grant y ya me diréis:



No importa que los que no entendáis inglés no os cuesquéis (aunque los diálogos están llenos de miga). Fijaos en sus gestos, en su cara y en su forma de hablar. Dice la leyenda que los hipos de Jimmy no estaban en el guión, que fue una morcilla que metió por propia iniciativa, que Cary Grant tuvo que hacer enormes esfuerzos para no partirse de risa y que por eso mueve las manos de forma compulsiva por debajo de la mesa.

En cuanto a la Katherine, está impresionante. Es casi increíble que una mujer que es como una escoba lista a impartir estricta disciplina inglesa (con enormes ojos, eso sí), resulte tierna, atractiva y ¡sexy! y si no, ahí va una de las mejores escenas de la peli para demostrarlo:





El Jimmy no debe ser tan tirillas como parece porque la lleva en brazos con total soltura. Oye, que ya sabemos que eso no es tan fácil: una vez (si hay niños que se vayan a dormir), tras una tórrida escena en un sofá intenté tomar en brazos a la maciza en cuestión, fuí dando traspiés por el pasillo y casi doy con sus huesos (y carnes) en el suelo.

Fijaos en como va moviendo la pierna al ritmo de "Someday over the rainbow" y la cara que pone cuando ve a su ex-marido y a su novio. Genial. Y ¿cómo mueve las manos para decir "good night"?

En fin, que lo pasé genial, que no me di cuenta de la hora, que estoy dispuesto a verla todas las veces que sean necesarias hasta que me la aprenda de memoria. Si podéis, no os la perdáis. De verdad

vendredi 25 septembre 2009

Dia europeo de las lenguas extranjeras



Hoy es el día europeo de las lenguas extranjeras. Le he añadido lo de "extranjeras" al anuncio oficial, porque lo de "día europeo de las lenguas", me suena un tanto, ¿qué queréis que os diga?, a día de los lametones o chupeteos... Y entiendo por "extranjeras", las que no son la lengua materna. No le busquéis connotaciones políticas.

Es un tema apasionante, sobre todo para los que vivimos fuera de las fronteras de lo que llaman los catalanes "la pell de brau". Y aquél de vosotros que no haya tenido tropiezos con el tema, que tire el primer diccionario.

¿Cuántas risitas no habreis provocado al decir "je suis constipé", pensando que decíais que estábais acatarrados cuando quiere decir "estreñido"? O aquel otro amigo que pisó sin querer a una señora y le dijo "pardon, madame, je vous ai pisé" , ante el espanto de la buena mujer que movió espasmódicamente los zapatos tratando de sacudirse un imaginario pis. Pues eso.

En fin, para celebrar el día en cuestión, ahí va un vídeo sobre la necesidad en un mundo cada vez más pequeño de hablar y comprender lenguas extranjeras:



Considero ofensivo para sus mercedes explicarles el tema. Por eso, los que lo hayáis entendido, cortad aquí.

Para los zopencos ;-) que no lo habéis comprendido:

Es, sin duda, un novato del servicio de guardacostas alemán. Por el amigable golpe en el hombro que le da su jefe, se deduce que es su primer servicio. En eso, suena la radio, que dice:

"Mayday, mayday, we are SINKING" (nos hundimos)

El novato, confunde sinking con thinking (pensando), y con una angelical sonrisa les pregunta: "What are you THINKING about?"

Bueno, mis disculpas por la explicación. Lo de "zopencos" era una broma, kanieshna.

jeudi 17 septembre 2009

Los deportes de playa


Bueno, pues ya se está terminando el verano (me refiero en el hemisferio norte, queridos amigos del otro hemisferio, ya sé que ustedes recién están entrando en la primavera, así que les propongo que no lean este post hasta el próximo mes de Marzo si son capaces de retenerse). Bien, continúo. Como digo, se termina el verano. La playa es un vago recuerdo en el tiempo y en el espacio, así que he pensado que así, en frío, es el momento de analizar el apasionante asunto de los deportes de playa.

Para empezar, seamos racionales y dividamos la playa en tres partes diversas y diferentes:


Las dos partes fundamentales son, por este orden, el agua y la arena (o playa, propiamente dicha, aunque pueden ser tambien guijarrillos o incluso guijarros no tan "illos"). Si falta alguna de esas dos partes, queridos amigos, convencéos: lo que estáis viendo no es una playa. Puede ser el puerto de Estambul o el Sahara, u otra cosa así, pero que no os engañen, que no os cuenten milongas: eso no son playas. El cielo tambien tiene su importancia, porque si no se le ve podríamos estar, por ejemplo, en una caverna subterránea. Apasionante, pero no es una playa.

El agua es fundamental. Y yendo más allá, podríamos diferenciar dos partes en el agua: la superficie y las profundidades marinas. Como dijo un manchego socarrón, cuando alguien a la vista de un brillante mar, manifestó extasiado que el mar era maravilloso: "¡Y eso que sólo vemos la parte de arriba!". Tal reflexión me lleva a los deportes: los deportes de agua, pueden ser, en la superficie, o en los fondos marinos. En el primer caso, se retoza entre las olas y en el segundo, se pone uno unas gafas, un tubo, unas aletas y (nunca mejor dicho) ¡pelillos a la mar!


A mi me encanta lo de bucear, pero, la verdad es que todavía no he encontrado unas gafas en las que cada cinco minutos no tengas que vaciarles el agua que se acumula y no te deja ver. Debo ser un ceporro. Y lo de morder el tubo tambien tiene su gracia, acaban por dolerte todos los dientes. Pero en fin, es una forma magnífica de pasar el tiempo en la playa.

Los deportes de cielo, ni los voy a mencionar, porque eso de volar con un paracaídas arrastrado por una lancha que anda esquivando piernas de bañistas para no rebanárselas con la hélice, me produce más bien una cierta aversión.

Y llegamos a los deportes de playa, propiamente dichos. ¡Qué partidos de fútbol jugábamos en las playas del Sardinero durante la marea baja! Porque en marea alta no es posible. No se trata de atascarse en la arena, sino de tener una arena lisa y dura y blanda (no es un oxímoron, es la verdad, se entiende que tiene que ser consistente, no tierra). Con balones de plástico, los pies descalzos, las patadas no hacían heridos graves, si te caías no pasaba nada... Además, en el Cantábrico había que sudar un poco antes de entrar en el agua, tan fría, pero tan agradable cuando entrabas tras el ejercicio.

Y eso explica también la forma de jugar a las palas en el norte, tan diferente del Mediterráneo. Las palas eran la opción más lógica en marea alta para entrar en calor antes del baño. En fin, queridos lectores, os dejo juzgar por vosotros mismos. Así se juega en el Sardinero:



Y así en el Mediterráneo;



Oye, yo no digo que sea mejor el uno que el otro. Simplemente son diferentes. Hale, Hasta la próxima.

samedi 5 septembre 2009

La luna llena de ayer


Anoche estaba yo en la terraza de mi mansión, mirando la luna llena que aparecía entre bandadas de nubes llevadas por un viento del carajo. En los jirones de cielo que dejaban las nubes, a veces se podía ver a Júpiter (Por si no os habéis dado cuenta, Júpiter es esa cosa brillante que puede verse en el cielo nocturno cerca de la luna en estas fechas). Magia y tranquilidad. Calma. Agitada calma.

En el interior de la casa, todo estaba en penumbra (no en vano, la Comisión ha prohibido las lámparas incandescentes de 100 vatios). Pensé en ir a dormir. Con una vela en la mano, me aventuré por los pasillos oscuros de la casa. Un pijama (Georgie Dann nunca lo hubiera consentido), y al sobre.

Debían ser como las dos, o tal vez las tres de la mañana. Me desperté, inquieto. Creí oir un sonido, como de cántico. El sonido cambiaba de tono y crecía en intensidad, luego languidecía antes de recomenzar. Mi corazón se puso a latir de una forma bastante desacompasada, druk, druk, drrrudrru, drurrruk, pof, pof. Me costaba respirar. Uno es que nunca ha sido un valiente sin tacha, joroba. Una vez me dijo un taxista, cuando bajé en Malasaña acompañando a una maciza guayaba a la que se le caían los tirantes ante el rugir del personal, "recuerda, amigo: pelea ganada es salir corriendo". Desde entonces, ese ha sido mi motto.



Y entonces, entre sueños, la vi. Avanzaba hacia mi, como una presencia etérea e incorpórea. Me salvó la esposa del próximo primer ministro de Japón, que apareció en mi mesilla derecha. Me dijo que no tengo que preocuparme, que a ella la habían abducido varias veces, que había estado en Venus y ¡toma! ahora iba a ser la primera dama del Japón. Me tranquilizó.

Me desperté. Bebí un buen trago de agua. Encendí la luz (de menos de 100 vatios, no temáis, inquisidores). A la derecha de la cama había una especie de careta, de piel, agitándose nerviosa. Oyesss, la tiré a la basura, aprovechando que hoy venía Bruxelles Propreté.

mercredi 2 septembre 2009

¿Ya conoceis "La Taberna del Gourmet"?


Vaya por delante, queridos colegas y amigotes que sí, que admito que he estado un par de días en Alicante durante las pasadas vacaciones. Y lo digo, para evitar comentarios sarcásticos, como le pasó a mi amigo López, quien tras haber pasado un fin de semana en Knokke-het-Zoute, el sitio más "posh" y BCBG de la costa belga, al volver a Bruselas el lunes por la mañana quedó atrapado en monstruoso embotellamiento. Con una elevada dosis de stress llamó por el telefonino a su secretaria, una alemana más bien tirando a "non-conventional", de las que llevan un pañuelo palestino al cuello y se van de vacaciones en un viejo velero desvencijado por el Báltico, para decirle que llegaba tarde porque volvía de Knokke. La cortante respuesta de la secre fue: "And what the hell were YOU doing in Knokke?".

Bueno, pues eso, que he estado en Alicante, lo admito. Y voy a aprovechar para haceros una recomendación que no tiene precio. Hagáis lo que hagáis, vayáis donde vayáis, no os perdáis "La Taberna del Gourmet", porque vale la pena. Está en una de las calles más oscuras del centro de Alicante, pero ni caso. Su aspecto externo puede ser un poco sórdido, pero tanto da. Entrad y solazaos. No hay mucho sitio, es una taberna, pero una taberna suprema. Coged un sitio en la barra o en la barra lateral si no podéis sentaros y empezad a desgranar la carta. Verduras a la plancha, mariscos, unas ostras gigantes, jamón ibérico, escalivadas... No sigo porque no he cenado todavía y se me está cayendo la saliva por las comisuras. En fin, os pongo su dirección en la red para que comprobéis la carta y os pongáis rufos sólo de pensarlo.





La taberna del Gourmet
San Fernando 10 03002 Alicante
www.latabernadelgourmet.com