Queridos amigos, parientes, deudos, allegados, primos, compadres, comadres y demás gente que circula por el planeta bloguero y tiene el extraordinario buen gusto de leer esta especie de tontunas que, de cuando en vez (ya os explicaré por qué lo digo al revés) escribo para desaburrirme (yo tenía un profesor que decía que aburrirse viene de burro) pues eso, que quiero salir de esa condición burril. Decía que, queridos etc, etc (no voy a repetir todo, que se me van a quemar las lentejas que tengo en la lumbre), acabo de llegar de México. O como dirían mis cuates: "recién me regresé de Méééxico". Pues sí, he estado en México unos días. Cortos días. Ya os contaré más cosas, pero hoy, os voy a hablar (a platicar, quíhubole) del restaurante al que me llevaron mis compadres en México (ojo, para los no iniciados: México es la capital de la República. Lo demás es eso, "la república")
Mis compadres me llevaron a lo que se supone que es el mejor restaurante de México, llámase "San Angel Inn". A ver cómo lo pronunciáis: no me lo pronunciéis todo seguido, porque va a parecer que se trata de un ángel pequeñito: San angelín. Así es que, tomad aire levemente entre Angel e Inn. Venga, una dos y tres: San Angel (respirad un pelín) INN. Vale. Ya sé que se hubiera podido llamar "la Posada de San Angel", pero el nombre no lo he inventado yo. Es una hacienda colonial magnífica. No tengo otra palabra. Está -como su nombre indica- en San Angel, cerca de Coyoacán, y al ladito mismo del estudio de Diego Rivera. Sólo verlo, ya vale la pena, pero además se come rebién. Padrísisísimo (que se note que vengo de allá)
Como toda hacienda que se precie, tiene su capilla y todo:
Y unos salones principescos:
Aparte las comidas tipo internacional, hay platos totalmente mexicanos. Pedimos como entrada unos ostiones al gratín (o sea, ostras, no se me escandalice el público. Se llaman así en México) y, unas crepas de Huitlacoche. El huitlacoche es un hongo que crece en las espigas de maíz. Si eso te pasa en las llanuras de Albacete, se te joroba el maíz y te echas a llorar. Adiós maíz. Pero en México se come y está bueno, de verdad.
Crepas de huitlacoche
Con lo que no me atreví es con los escamoles. Los escamoles son huevos de hormiga. Sí, como suena, huevos de hormiga. He prometido que la próxima vez los voy a probar (también es cierto que más de una promesa he roto en la vida) . En mis tiempos mexicanos comí saltamontes en Oaxaca, una especie de rata (Tepezcuintle) y alguna otra cosilla simpática, pero no había probado nunca los escamoles. Para empezar, son muy caros (os imagináis, sacándole los huevos a una hormiga) y no los tienen en casi ningún sitio.
En fin, que lo pasé muy bien. Ya os seguiré contando más cosas de México.
Post Scriptum de Octubre 2010: Un nuevo viaje me ha descubierto dos nuevos restaurantes de gran nivel:
http://diriodeunaburrido.blogspot.com/2010/10/dos-nuevos-candidatos-mejor-restaurante.html
Vicente Fernández: Aprendiste a volar
(No se me arremolinen, doñas, la canción de Vicente Fernández que adjunto no implica que comparta sus puntos de vista machistas)
Qué interesante Monsieur Sorokin (¿o debí decir compadre Sorokin?) el lugar y los platos. Fijese que más impresión me da así a bote pronto comer la rata esa rarísima que narra, que los huevos de hormigas, claro que ya depende del aspecto del plato, que ya sabemos que comemos con los ojos.
RépondreSupprimer¿Y a qué sabe el huitlacoche?
Querida Madame Delikat, ciertamente tiene usted mucha razón. Comemos con los ojos. Ya me lo decía mi madre cuando yo era pequeño: "nene, comes con los ojicos" (mi madre era manchega) cuando me servía (yo, no ella, que el castellano tiene zonas ciertamente grises) un montón mas grande que yo de croquetas de jamón (obvio es decir que era mi manjar preferido).
RépondreSupprimerY la verdad, es que los platos mexicanos respetan mucho eso de comer con los ojos. La carne de tepezcuintle estaba troceada y con bien de chile, o sea que lo mismo daba que fuera rata que vaca. Los chapulines (saltamontes) de Oaxaca los comí en taco, con cebollita y tal (sólo notabas lo que era porque de vez en cuando se te metía una patita entre los dientes). Y los escamoles, como puede verse aquí, no tienen mal aspecto:
http://es.wikipedia.org/wiki/Escamol
El huitlacoche es suave y untuoso y sabe un poco como una seta (al fin y al cabo es un hongo)
Uy los escamoles! Eso se lo pones a un macrobiótico perdido diciéndole que es mijo con algas y se lo zampa enterito! No deja el pobrete ni las larvillas.
RépondreSupprimerSí. Tiene un aspecto muy inofensivo. Me estoy animando, tal vez los pruebe en el próximo viaje...
RépondreSupprimerAh... México D.F. es una de mis tareas pendientes de las grandes urbes que sueño con visitar... gracias por el dato, y gracias por las pequeñas clases de pronunciación para no montarse en un taxi y decir: lléveme al San Angelín...
RépondreSupprimerSaludos cuate
Pues sí, Claudia, el DF tiene muchas cosas interesantes. También, por supuesto, como todo monstruo de veinte millones de habitantes, sus inconvenientes. El tráfico es absolutamente infernal, por ejemplo. Pero merece la pena darse una vuelta por allá y ver, al menos, el Zócalo, la Catedral, el museo de antropología, los murales de Rivera y Siqueiro; ir a Teotihuacán, etc etc.
RépondreSupprimerY, desde luego, comer en "San Angelín" ;-)
Genial lo de ostiones! Mira que si un mejicano se presta a darte ostiones y tú te niegas....
RépondreSupprimerMe he quedado con una duda: ¿De qué tamaño son los huevos de las hormigas??? ¿No le hiciste foto? No me lo imagino, porque si ya las hormigas son pequeñas..a menos que en Méjico tengan otro tamaño diferente ;-)
Pues sí, lo de "ostiones" es claramente una exageración. Si comparamos el tamaño de un así llamado "ostión", con una ostra de Arcade, se queda en nada: son como tres veces más pequeños. En fin, que deberían llamarse "ostines". Oye, pero cada uno es cada uno y puede llamar a sus cosas como quiera.
RépondreSupprimerY de los huevos de hormiga, hay una foto en la Wiki (yo es que no quise ni verlos):
http://es.wikipedia.org/wiki/Escamol
Pero insisto: la próxima vez, los voy a probar, que no se diga que me achanto (una vez mas)
Ya me di cuenta ayer que pasaba lo de la imagen de mi blog...no sé si sabré arreglarlo!
RépondreSupprimerGracias por avisar.
Hola: Gracias por tu visita a mi blog. Paso a darte datos sobre las flores y de paso de los insectos que te llamaron la atención.
RépondreSupprimerEs una lástima que no tengas correo para poderte dar estas direcciónes y sea más fácil llegar al punto de referencia.
http://saboreartentusiasma.blogspot.com/2007/05/florofga-en-el-jardn-botnico.html
http://saboreartentusiasma.blogspot.com/2009/04/las-flores-son-las-mujeres-de-santiago.html
http://saboreartentusiasma.blogspot.com/2008/04/ra-ngo-ga-huni-ma-hai.html
http://saboreartentusiasma.blogspot.com/2006/04/festival-de-santiago-de-anaya_02.html
Por otro lado creo excesivo calificar al San Angel Inn como uno de los mejores restaurantes de México. He estado ahí varias veces y no sólo puedo decir que es un buen restaurante, nada más, punto.
un saludo
Hola Carmen. Muchas gracias por tu visita y por las informaciones que me mandas que son fascinantes. Gracias. Las aprecio en todo lo que valen. Yo, hace años estuve viviendo en Veracruz, pero allá, la cocina es más de mariscos, manos de cangrejo, robalitos, caldito de camarones, vuelve a la vida, etc... Ahora decubro que no conocía la auténtica comida mexicana.
RépondreSupprimerSin duda alguna las crepas de cuitlacoche son de lo mejor, muy ricas la vdd; un saludo Restaurantes Cancun
RépondreSupprimerGracias por el comentario, Restaurantes Cancún. Es una lástima que aquí en Europa no se encuentre Cuitlacoche, aunque sé que en México lo había en conserva, pero acá no llega.
RépondreSupprimerSaludos