lundi 10 mai 2010
"Marshal Shaposhnikov", Vladivostok, los piratas de Somalia y el transiberiano
Estuve en Vladivostok en Mayo de 2007. Ya se lo que me vais a decir, porque os voy conociendo: Pero... Sorokin, cómo nos vienes ahora con la que está cayendo, con una batallita de hace tres años, diablos, ¡por cien mil truenos de Brest!. Bien, me explico: resulta que hice unas fotos en el puerto, que como todos -que sois gente leída y escribida- sabéis es la base de la flota rusa del pacífico. El buque (queda fino lo de buque ¿eh?) que sale en la foto de cabecera es el "Marshal Shaposhnikov", y si no me creéis lo leéis en el casco del chisme. Está en Cirílico -lógico- pero se entiende. Y, mira tú por donde, es el barco que, según la prensa ha atacado a los piratas somalís que habían invadido un petrolero lleno de rusos. O sea, que el tal Marshal Shaposhnikov se ha vuelto el barco más famoso de la armada rusa (quitando al submarino "Kursk", claro). y ¿quien lo fotografió? un servidor, aunque no supiera que estaba fotografiando algo famoso.
Aparte de eso, sólo estuve en Vladivostok tres días, y el último me llovió hasta el forro de los calcetines, pero suficiente para darme cuenta que es una ciudad interesante, muy rusa, pero llena de influencias chinas y coreanas (al fin y al cabo, Moscú está a ocho mil kilómetros, y Seúl está ahí al lado). Curioso que todos los coches llevan el volante a la derecha, como en Japón, pero se circula por la derecha, como en Moscú. Me dijeron que es porque todos los coches son japoneses de segunda mano. La ciudad tiene un aire próspero, donde las nenas se pasean a caballo por las calles:
La marina está presente en todos los rincones, incluso en la calle:
Todo tiene una aire de ¿cómo diría yo? ¿colonial? como los "comptoirs des indes", como de gente que se sabe y se quiere rusa, pero que están un poco dejados de la mano de la metrópoli, que está lejos, muy lejos... y China está cerca, muy cerca...
Me hubiera gustado tirarme el farol de que fuí en el transiberiano, pero no, que fuí en un Ilyushin desde Moscú. Ocho horas de vuelo. No es el el lujo del tren, pero por lo menos las tualetes eran de cobre electrolítico:
En fin, que fue un viaje interesante, que se comía buen pescado y que menos mal que estuve en Mayo, porque es una ciudad llena de cuestas. En invierno, con todas las cuestas heladas, hay como para pegarse unas mangurrinas resbalando que válame dios. ¡Ah! y que me he enterado por la Wiki que el Mariscal Shaposhnikov existió de verdad y fue un héroe de la URSS.
Qué cosas.
Monsieur Sorokin, lo que más me ha impresionado de su relato es enterarme de que las Vladivostokianas o como se llamen las nenas de esas latitudes, se paseen así a caballo tan libres, como la del anuncio de Terry de nuestra infancia vaya.
RépondreSupprimerMadame Delikat, gracias por abrirme los ojos. ¡Es cierto, no había caido! ¡la moza ecuestre es como la rubia del anuncio de Terry! Algo me rondaba por la cabeza cada vez que miraba la foto, pero no era capaz de identificar qué era... Ahora ya lo sé, en serio.
RépondreSupprimerEn cuanto que vaya tan libre, sin duda es porque era en Mayo. Ya me gustaría a mí ver cómo se las apaña en Febrero a menos 20 grados :-)
Yo ha sido verla y he tenido una especie de regresión lostiana aguda.
RépondreSupprimerEs cierto. La chica, con su melena rubia es totalmente homologable a la amazona Terryble (de Terry). El caballo, en cambio, era blanco. Bueno, no sé, porque el sketch era en blanco y negro ¿o no?
RépondreSupprimerMuy bien Sorokin, advierto que estás al loro, que no se te escapa nada, ni los nombres de los buques de hace 3 años, y que lo de las mozas a caballo nos ha flipado a todos.
RépondreSupprimerPues verás, Alex, todo tiene una explicación: andaba yo tratando de poner un poco en orden el archivo de mis fotos (porque entre nosotros, es un desastre, nunca encuentro nada). Caí sobre Vladivostok (vamos, lo de caer es un decir, o sea que no me hice daño), vi las fotos de los buques (hay más, es cierto), leí el de éste, y me dije ¡tate! este es el de los piratas... y como andaba escaso de inspiración para esto del blog, decidí daros la barra a todos con lo del barco. Para suavizar puse la de la rubia a caballo.
RépondreSupprimerAh, cómo disfruto siempre de tus entradas. Por cierto, las fotos están muy buenas, sobre todo la de la chica a caballo...
RépondreSupprimerDiste muy bien las coordenadas fronterizas de Rusia, pero se contradicen un poco a la sapientísima Sara Palin, que aseguró que desde su ventana podía ver Rusia.
Saludos.
Muchas gracias, Claudia. Lo de Sara Palin puede ser un exceso de vista aguda, quién sabe. De hecho, a lo mejor esas lentes que usa son en realidad catalejos de larga distancia. :-)
RépondreSupprimerJajaja, la verdad es que me has arrancado una carcajada con mi café en mano... la verdad (lo de la posibilidad de que sean catalejos) nunca me lo hubiese imaginado-
RépondreSupprimerPues, Claudia, me alegro que te hayas reido, aunque espero que tuvieras el café bien agarrado, porque la última vez que me puse a reir con un café en la mano, puse el sofá de mi salón perdido. No te cuento. Y la mancha de café no sale ni haciendo rogativas a Santa Clara, patrona de la los limpiadores. :-)
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